Arquivo para 24/07/2010

¡¡Hola a todos!! Ya estamos a sólo 800 kilómetros de nuestro destino final: el Cabo Norte. Seguimos en Suecia, pero ya estamos a las puertas de Finlandia. Hemos decidido quedarnos dos noches aquí, en Sikfors, para descansar porque el cámping es muy agradable y tenemos una cabañita de lo más simpático. Aquí tenéis la ruta que hemos hecho hoy:

Afortunadamente la temperatura ha subido un poco y hemos pasado el día entre los 13º y los 14º. A esta hora llevamos unos 4.200 kilómetros y esto hace mella en nuestros cuerpos. Aquí el que más y el que menos está hasta el gorro del coche. Estoy escribiendo estas líneas a la una de la mañana y estoy emocionadísimo porque… ¡no se ha hecho de noche! Se ha puesto el sol pero estamos, como se dice en gallego, entre lusco e fusco. Es decir, que hay luz más que suficiente como para andar por la calle sin tropezar y en ningún momento se ha hecho noche cerrada. Estoy literalmente alucinando. Cuando acabe de escribir me largo a dar una vuelta… a esta hora de la madrugada.

Ya sabemos por qué la gente habla inglés tan bien en Suecia. La chica del cámping nos explicó que, desde pequeños, los niños tienen prohibido hablar en sueco en el colegio: todas las asignaturas son en inglés, los exámenes, etc… todo en inglés.

Os había prometido unas fotos de nuestra mascota, Coco. Aquí las tenéis:

Si no fuese por Coquiño, el viaje sería muy aburrido.

Y es que todo el mundo lo mima:

Incluso dormimos con él. Aquí tenemos a la Sirenita que faltaba en Copenhague:

Aunque sale un poco borrosa, aquí veis una señal de advertencia de la presencia de renos cruzando la carretera. Mis compañeros dicen haber visto un par de renos muertos en el arcén, pero yo iba en mi mundo, como siempre y no los vi. Los renos vivos son como las meigas: habelas hainas, pero non as vimos.

Los topónimos suecos son muy fáciles de pronunciar. Poned la lengua como si fuerais a pronunciar una “u”, pero luego redondead los labios como para pronunciar una “v” y entonces pronunciad una “x”. Finalmente, haced el pino y mirad oblicuamente para la pared.

“Gracias” se dice “takk” e “y” se dice “och” (pronunciado “ok”). Id practicando. Aquí tenéis nuestra chocita. Parece de juguete:

Bienvenidos al salón:

La puerta principal:

El cámping también tiene lavadora (boa falta nos facía):

Una de las habitaciones:

Otra perspectiva del salón:

La cocinita:

En fin, en esta parte de Suecia, que hemos bautizado como la Suecia profunda, tienen como hobby la restauración de coches antiguos. Tanto es así que a veces tienes la sensación de estar en La Habana y no en Suecia. Hemos visto verdaderas joyas de colección por la carretera, algunos de ellos muy destartalados, de los años 50. Sin embargo, sólo tengo una foto de este, que parece (digo yo) de los 70 que estaba aparcado en el cámping esta tarde:

Después de lavar la ropa y colocar las cosas en su sitio, nos hemos ido a dar una vuelta por los alrededores y hemos descubierto que hay unos mosquitos del tamaño de un Jumbo (ya nos habían advertido que es un fenómeno típico de Laponia) y hemos visto (han visto; yo sólo he oído) un salmón del tamaño de un portaaviones saltando del agua:

Ademais, fixen esta foto para o meu tío de Panxón, que é moi aficionado ao tiro. Resulta que teñen un pequeno campo de prácticas con dianas e todo:

E mirade que solpor:

Tal y como os prometí, me voy a dar un garbeo de nuevo, porque es la una y diez de la mañana y hay luz más que suficiente como para eso y más.